¿Te vas de vacaciones y no tienes quien cuide tus plantas? ¿Se te olvida regarlas con frecuencia? ¡No te preocupes! Hoy te enseñaremos a construir una maceta de autorriego con materiales reciclados.
Materiales:
- Una garrafa de agua de plástico (5 litros es un buen tamaño para empezar)
- Un cúter o tijeras resistentes
- Cordón de algodón o tiras de tela vieja
- Sustrato para macetas
- La planta que quieras cultivar
Pasos:
- Corta la garrafa: Lava bien la garrafa y córtala por la mitad. La parte inferior será el depósito de agua y la superior la maceta.
- Prepara el sistema de capilaridad: Haz pequeños agujeros en la base de la parte superior de la garrafa. Corta varios trozos de cordón de algodón (unos 20-30cm) y pásalos por los agujeros, dejando que un extremo quede colgando en el interior del depósito y el otro en la parte superior.
- Monta la maceta: Coloca la parte superior de la garrafa (la que hará de maceta) dentro de la parte inferior (el depósito).
- Añade el sustrato: Llena la maceta con sustrato, dejando espacio para la planta.
- Planta tu planta: Con cuidado, trasplanta tu planta a la nueva maceta.
- Llena el depósito: Añade agua al depósito inferior, asegurándote de que los cordones queden sumergidos.
¡Y listo! Ya tienes tu maceta de autorriego. El agua subirá por los cordones mediante capilaridad, manteniendo la tierra húmeda y tus plantas felices.
Consejos:
- El tipo de cordón: El algodón es ideal por su capacidad de absorción.
- La cantidad de agua: No llenes el depósito hasta arriba, deja un espacio para que las raíces respiren.
- El tipo de planta: Esta técnica funciona mejor con plantas que no necesitan mucha agua.
- Observa tu planta: Aunque sea autorriego, vigila la humedad de la tierra y el nivel del agua para asegurarte de que todo funciona correctamente.
Beneficios del autorriego:
- Ahorro de agua: Al ser un sistema cerrado, se reduce la evaporación.
- Menos trabajo: No tendrás que regar tan a menudo.
- Plantas más sanas: La tierra se mantiene húmeda de forma constante, evitando el estrés hídrico.
- Ideal para vacaciones: ¡Tus plantas estarán bien cuidadas aunque no estés!
Anímate a crear tu propia maceta de autorriego y disfruta de plantas más sanas y felices con menos esfuerzo. ¡Es una forma sencilla y sostenible de cuidar tu pequeño jardín!